miércoles, 25 de julio de 2012

11.-RECUERDOS...mi amado enemigo



POV BELLA

La respuesta de irse con un amigo no me convencía para nada, Edward era astuto y eso lo sabía pero yo había logrado conocerlo más allá de lo que él pensaba y creía, él no sería capaz de mentirme o al menos eso pensaba por que se había puesto nervioso al decirme a donde iba, y aún más cuando no me dejó ir con él.

Ese no era para nada su comportamiento habitual, y por eso decidí hacer algo que había dejado pendiente hace poco.

Caminé hacia el escritorio de madera y tomé la fotografía de aquel señor del otro día, la observé fijamente y tuve la sensación de querer recordar algo pero sin poder hacerlo, era desesperante sentirme así y no me gustaba para nada.

Tratando de ignorar esa espinita que me molestaba demasiado, seguí buscando en los cajones, uno por uno pero no había nada más que cosas de papelería, así que solo tomé aquella imagen y volví a entrar al cuarto de Edward.

La curiosidad me mataba por que estaba completamente algo me ocultaba y quería descubrirlo, y si, el que busca encuentra pero correría ese riesgo a pesar de que lo que pudiera encontrar no fuera lo que más me gustaría ver.

Busqué en los cajones de su habitación pero no había nada, estaba tan vacío como en el escritorio, también busqué en el closet pero tan solo había ropa, de allí en fuera no había ningún otro lugar donde poder buscar, me sentí decepcionada.

No había nada que me pudiera ayudar en mi búsqueda salvo que en su cama estaba su computadora, pensé que no podría descifrar la clave como la vez anterior pero debía intentarlo.

Tomé la computadora y la abrí, para mi sorpresa esta vez estaba desbloqueada, Edward no la había programado para pedir la contraseña, una señal más de su mentira, estaba tan interesado en salir que no se había preocupado por bloquear su información.

Claro, ya tenía la oportunidad que quería pero justo en este momento no sabía que rayos debía buscar y más con el tiempo encima, Edward había prometido no tardar y eso si podía creerle.

Busqué en los archivos y supe inmediatamente que era lo que ansiaba encontrar en cuanto vi que solo había un par de archivos, uno decía mi nombre y el otro era de Charlie Swan, ¡era mi apellido!, esa persona debía ser algo de mí, pero no me explicaba el por que Edward tenía un archivo de mi, por más que le buscaba coherencia nada coincidía.

No podía recordar como Edward y yo nos habíamos conocido pero era ilógico que él me investigara antes de ser novios, pero después averiguaría eso, lo que más me intrigaba era saber más de ese tal Charlie, ¿Quién diablos era?

Dí clic sobre el archivo y me desplegó varías páginas en Word, llenas de datos pero como principal pude ver la imagen del mismo señor de la fotografía que por el nerviosismo yacía arrugada en el puño que se había formado en mi mano.

Comencé a leer, aquí estaban todos sus datos, nombre, edad, ocupación, parecía una biografía pero las palabras debajo de todo eso me hicieron estremecer…hija Isabella Swan.

Me quedé helada observando la pantalla como boba, ese señor era mi padre y por eso su foto había llamado tanto mi atención ahora lo comprendía, el color de sus ojos y del cabello, no habían sido importantes hasta ahora.

-¡Aggghhh!-grité cuando mi cabeza me punzó con toda su fuerza, era insoportable.

Pero con el dolor vino algo aún peor, ahora podía verlo con claridad, Edward Cullen era mi secuestrador y no lo que había fingido ser todo este tiempo, ahora podía recordar a Charlie, claro él nos había estado vigilando antes de encerrarme.

Los recuerdos habían regresado pero los otros no se habían ido, la desesperación me partía en dos, por un lado lo odiaba, sabía el daño que me había hecho a mí y a mi padre, sabía que debía aborrecerlo pero no podía hacerlo por completo, yo lo…amaba.

Pero traté de borrarme esa idea de la mente en el mismo instante en el que había llegado, él debía haberse aprovechado de mi estúpida amnesia para engañarme, para hacerme creer que me quería cuando en realidad solo lo fingía para que yo no escapara a la menor oportunidad, para que no lo acusara con la policía y se pudriera en la cárcel.

¿Qué haría ahora? Por supuesto que la opción de todo esto era escapar, lo haría ahora mismo.

Cerré la computadora de golpe con el corazón aún agitada por la sorpresa, me iría de aquí inmediatamente aún si no supiera en donde estaba o hacia donde debía de ir, pero no me importaba para nada por que quería regresar a casa, contarle a mi padre lo que había sucedido y escapar de ahí hasta que Edward estuviera detrás de las rejas.

Estaba a punto de marcharme cuando oí su auto acercarse, podía salir y correr pero él me alcanzaría, y además ahora que mi opción de escape quedaba totalmente eliminada lo único que podía hacer era lo mismo que él, fingir.

No me dio tiempo más que de quedarme allí parada y fría a esperar a que él entrara por la puerta.

-Hola amor-saludó al entrar por la puerta avanzando hacia mí, dí un paso hacia atrás sonriendo a medias, sabía que debía fingir pero no podía hacerlo bien, la angustia, el rencor y el temor a que si descubría que yo me había enterado de todo, me encerrara de nuevo y tomara represalias en contra de mi padre.

Él notó mi duda.

-¿Qué sucede?-preguntó precavido, mi reacción parecía asustarle, como si yo pudiera hacerle algo y no al revés.

-Nada, es solo que te extrañé, es tonto por que no te fuiste por mucho tiempo pero tenía un mal presentimiento-mentí, él sabía que en veces anteriores realmente no me gustaba que se fuera, así que me abrazó.
-No me ha pasado nada, tranquila, ya estoy aquí y no me iré a menos que tú me lo pidas-me dijo mientras buscaba mis labios, lo esquivé.

-Bella… ¿de verdad no pasa nada más?-me preguntó con voz seria, si yo seguí a con esta actitud, me descubriría pronto.

Sabía que estaba mal, sabía que él nos había hecho daño a mí y a mi padre pero debía distraerlo, y no podía evitarlo yo lo quería, no podía odiarlo como recordaba haberlo hecho.

Miles de ideas pasaron por mi cabeza, pero no pude hacer mucho contra el deseo que sentía cada vez que él se acercaba a mí de esa manera, me di por vencida, me dejé por llevar por las increíbles sensaciones que Edward causaba en mí, dejé que me besara y que de nuevo me hiciera suya.

-Te amo Bella, te amo más que nada en este mundo-me dijo Edward al oído mientras me abrazaba con ternura, era doloroso que dijera eso, ahora que ya sabía la verdad, me dolía saber que por un instante había visto mi futuro a su lado, que por breve lapso de tiempo había creído amarlo y lo que me daba más miedo era saber que quizá mis sentimientos por él no cambiaran.

-¿Sabías que siempre seré sincera contigo pase lo que pase?-le pregunté con toda la intención de hacerlo caer, él decía que me amaba y yo sabía que decía la verdad por que no tendría por que mentir, no cuando pensaba que yo no recordaba nada de lo que él había llegado a ser.

-Bella... ¿Por que dices eso?-preguntó nervioso.

-Por nada, solo quiero que lo sepas, yo querría que tú fueras sincero conmigo todo el tiempo-dije con tono inocente, no quería levantar sospechas acerca del repentino regreso de mi memoria, pero que a la par se sintiera presionado a decirme la verdad.

Edward no dijo nada, pero si se puso de pie y comenzó a vestirse, agradecí el gesto por que sinceramente dudaba poder mantener una conversación seria con Edward como Dios lo trajo al mundo frente a mí.

Lo imité, mi intuición me indicó que pronto se aclararían las cosas y más me valía estar vestida por cualquier cosa.

-¿Qué te pasa?, si fue algo que dije…-me disculpé tratando de parecer lo más inocente posible, como si de verdad no hubiera querido confundirlo.

-No eres tú Bella-comenzó a decir seriamente.

-¿Qué? ¿No eres tú Bella, soy yo?-pregunté fingiendo tristeza-¿quieres terminar conmigo?

-No quiero romper contigo y ese es el problema, que te amo y me dolería demasiado perderte-me dijo como un hombre derrotado, reprimí una sonrisa, ahora no faltaba mucho para que Edward me dijera la verdad.

Sabía que en cuanto me había enterado de la verdad debí haber escapado, sabía que debía denunciarlo pero no podía, no ahora que lo conocía de verdad, cuando él me dijera la verdad, quizá podría perdonarlo, quizá él y yo…

-No me vas a perder, no quiero que digas eso-le pedí dulcemente, ya no podría resistir más así que más le valía decirme la verdad de una buena vez.

-Bella, yo también seré sincero contigo siempre-prometió, abrazándome y llevándome de nuevo al sofá, encendiendo la tele y haciendo como si nada, supe inmediatamente que no me diría nada, que si por él fuera, yo no me enteraría de su pasado nunca.

La decisión la había tomado él con su última respuesta, en cuanto tuviera la oportunidad escaparía a donde fuera, no recordaba la forma de salir de allí pero para cuando Edward se diera cuenta yo ya estaría muy pero muy lejos de él.

POV EDWARD

Las palabras de Bella me habían llegado a lo más profundo, era como si de alguna manera ella supiera ya lo que había pasado antes de su “accidente”

Sabía que debía decirle la verdad, que debía confesarle lo que le había hecho, que la había alejado de su padre, explicarle mis motivos, decirle que sobre todas las cosas la amaba, que la necesitaba, que no quería que se alejara de mí y que fuera mía por el resto de nuestras vidas.

Pero no pude decirle nada, no pude afrontar el miedo de perderla, así que solo la lleve a ver la tele, no se me ocurrió nada mejor para distraerla ni para distraerme a mí, puede que las cosas se complicaran un poco, pero entonces ya estaría listo para decir la verdad.

Con Bella de nuevo en mis brazos, y a pesar de tener el peso de la mentira sobre mis hombros no pude evitarlo, los ojos parecían pesar demasiado, era extraño que tuviera tanto sueño pero quizá fuera por la presión que me dejaba agotado, una pequeña siesta no me causaría ningún daño, al final Bella estaría a mi lado cuando despertara…

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Alo0! Bueno aquí tienen uno de los últimos caps! Perdón por no hacerlo más largo pero es que sigue uno donde las cosas no serán las más esperadas, espero este les haya gustado =D, gracias por leer, saben que eso es lo que me invita a seguir escribiendo.

Debo admitirlo me siento un poco liberada, por que al acabar este fic podré terminar otras ideas que tengo en mente y así traerles más historias que espero de todo corazón les gusten, gracias por el apoyo a este fic, os dejo con un beso y un abrazote, atte. YoceCullen.

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