sábado, 26 de abril de 2014

2.-Cita


Últimamente pasaba más tiempo en casa de Lorena que en la mía, ella siempre incondicional a mi lado, mi mejor amiga desde hace ya varios años, ella quien siempre había estado conmigo en las buenas y en las malas, de corazón agradecía tener a una amiga tan fiel en mi vida.

-¿Que te parece si vamos al cine?-la voz de mi amiga siempre tan alegre.

La miré y le dediqué una sonrisa, ella siempre lograba distraerme del tema de mi madre, por esa misma razón prácticamente vivía con ella, Lorena estaba feliz y sus padres me recibían con gusto.

-Esta bien-me paré de su sillón alisando mi blusa-tú eliges la película y yo compro las palomitas ¿Te parece?

Después de eso no tuve que hablar demasiado, su madre nos llevó a la plaza y mi amiga no paró de hablar sobre las opciones que teníamos para ver durante todo el camino.Lorena era fácil de satisfacer, no necesitaba de mucho para que ella estuviera suficientemente feliz para distraerme a mí.

Yo no siempre había sido tan pesimista, de hecho yo era muy alegre y por eso Lorena y yo nos habíamos vuelto inseparables, y en ocasiones mi antigua personalidad se asomaba esperando una oportunidad para salir y volver a mi convirtiéndome así en la Mía Montez que siempre había sido.

Supongo que por esa misma razón ella seguía a mi lado a pesar de todo, por que mantenía la esperanza de que yo volviera a ser la que siempre fui.

-¿Amor o terror?-se volteó hacia mí-¿Qué opinas amiga mía?

-De terror amiga Lorena-

-Dije "mía" de que eres mi amiga no por tu nombre-me reprochó

-Ya lo sé pequeña, solo quería molestarte-le enseñé la lengua como cuando niñas, ella rió.

-¡Me llamaste pequeña! Hace mucho que no me decías así...-se perdió en sus recuerdos-oye, si no mal recuerdo así te decía Leonardo ¿No?-

Asentí mientras caminaba hacia la taquilla y sacaba el dinero de mi cartera.

-¿Qué habrá sido de él?-preguntó.

-Dos para "Terror en el centro comercial" porfavor-no miré a mi amiga, la conocía lo suficiente como para saber que terminaría pidiendo más información.

Tomé los boletos y caminé hacia la dulcería. Mi amiga seguía mirándome de la misma forma, la ignoré.

-¿Palomitas y refrescos grandes?-

-Mía...-lo sabía, Lorena no dejaría el tema de nuestro antiguo amigo en paz, aún así decidí torturarla aún más.

-No te preocupes, las golosinas también corren por mi cuenta, mucho haces con recibirme en tu casa a diario-

-Mis padres están felices de recibirte en casa tanto como yo, adoramos que estés allí todos los días, y sabes perfectamente que tampoco me refería a quien pagaría las palomitas-me reprochó.

Suspiré.

-El otro día Leonardo me envió un mensaje de texto, me dijo que le gustaría platicar un día de estos...-hice una pausa-...sobre mi madre.

Mi amiga no dijo nada, comprendía el porque no quería hablar sobre nuestro antiguo amigo.

-Bueno-me sonrió-quizá sea bueno que salgas con él y platiquen, no sabes...quizá sea bueno que se vean...-me dedicó una de sus miradas de "Necesitas un novio y distraerte urgentemente"

-Tú siempre...-me enfoqué de nuevo en las palomitas-y...¡Hey! ¿Qué haces?

Lorena me arrebató la bolsa y echó a correr, comencé a perseguirla pero ella era mucho más rápida que yo y rápidos se escondió de mí, me resigné...¿Qué es lo peor que podía hacer con mi bolsa? Pronto supe la respuesta.

-¡Listo!-gritó triunfal mi amiga apareciendo por detrás de un puesto de helados de la plaza con una sonrisa de oreja a oreja dibujada en el rostro, lo cual significaba alguna travesura desgraciadamente desfavorable para mí.

-¿Qué hiciste?-rezongué.

-Mañana, a las tres, aquí en la plaza-

-Dime que no...-tartamudeé-dime que no me hiciste una cita con Leonardo-

-Si quieres no te lo digo pero no permitiré que lo dejes plantado, si hubieras visto la velocidad con la que respondió el mensaje-amenazó.

¿Una cita? ¿Con Leonardo? Bueno en teoría no sería una cita, él era mi amigo nada más y si como decía Lorena...bien podría distraerme y salir con alguien más que no fuera ella, al menos le debía un descanso de mí, todo estaría en orden mientras no habláramos de mi madre.

-¿Y bien...?-insistió-¿Estoy lo suficientemente perdonada como para aún ser merecedora de unas palomitas?

Me reí, ella siempre lograba salirse con la suya y levantarme el ánimo a la vez.

-Estás loca-

-Aún así me quieres-

-Y mucho-hice una pausa-ven, vamos por esas palomitas.





La película estuvo...bueno en verdad no le había puesto atención, la idea de ver a Leonardo me había puesto nerviosa, hace mucho tiempo no lo veía.

La madre de Lorena fue por nosotras a la plaza, después pasaron a dejarme a casa. Papá aún no llegaba, así que decidí ir a dormir, en realidad no tenía sueño pero tampoco quería pensar demasiado sobre la salida con mi amigo, terminé escuchando música.

No me di cuenta de cuando terminé dormida, tan solo desperté gracias al sol que insistía maldoso quemándome la cara, de pronto volví a la realidad, hoy era el gran día del reencuentro.

Revisé mi celular, tenía dos mensajes de texto.

El primero...

"Buenos días dormilona, ayer cuando llegué ya estabas dormida y no quise despertarte, y tampoco quise hacerlo hoy por la mañana, te he dejado dinero en la mesa por si quieres salir o comprar algo para comer, te quiero, espero verte por la noche."

Papá siempre al pendiente, lo extrañaba y las vacaciones afectaban mi ciclo del sueño dándome la impresión de que se oponían a que viera a mi padre. Reí ante la idea tonta en mi mente.

Revisé el segundo mensaje.

"Hola pequeña, oye...sé que quedé en salir contigo hoy pero tuve un percance y no podré verte, espero no te enojes, te quiero"

Bien, por un lado me sentía aliviada pero por otro, quizá si quería verlo y me sentí un poquito decepcionada.

Otro mensaje llegó en ese momento.

"Floja levántate, recuerda que tienes una cita hoy a las tres" Era Lorena.

"Canceló de último momento, así que no hay cita ni nada parecido" Respondí.

"¿Que? No puede ser...¡Yo lo mato!, voy para allá" Ya podía verla enojada, si algo la sacaba de quicio eran las cancelaciones.

No tenía caso responder, mi amiga no tardaría en llegar a casa...ya estando aquí la tranquilizaría, aunque era realista, cuando una idea cruzaba en la mente de Lorena, pocas cosas lograban hacerla cambiar de opinión.

___________________

Gracias por leer, espero puedas dejar un comentario para saber que opinas, que quieres que pase o crees que sucederá...

Espero te haya gustado, nos leemos pronto ^w^

No hay comentarios: